
En un estudio retrospectivo Bateman y cols. toman los datos del programa de salud de EE UU (Medicaid) que cubre aproximadamente el 40 % de los embarazos de ese país. Se trata de una cohorte extraída entre los años 2000-2010 y recoge las gestaciones que han finalizado con un recién nacido vivo. En el análisis multivariable se incluyeron numerosas variables de confusión que por si mismas pueden aumentar la frecuencia de malformaciones: diabetes, HTA, dislipidemia, tabaquismo, abuso de alcohol, insuficiencia cardiaca, enfermedad renal crónica y cardiopatía isquémica. El objetivo principal fue verificar la proporción de malformaciones congénitas globales, malformaciones cardiacas y malformaciones del sistema nervioso central (SNC) en las gestantes que habían recibido IECAS versus las no expuestas.
En total se incluyeron 1.333.624 gestaciones. El número global de mujeres que recibieron IECAS en el primer trimestre fue de 4.107.En esta cohorte global la prevalencia de malformaciones congénitas fue superior en las que habían recibido IECAS que en las no expuestas (RR 1,82. IC 95 %1,61-2,06).
El total de gestantes con HTA fue de 18.515 y de ellas 2.631 (14 %) recibieron un IECA en el trimestre primero siendo el lisinopril (55 %) el más prescrito. Las mujeres hipertensas que recibieron IECAS tenían edad más avanzada, mayor prevalencia de diabetes y de enfermedad renal. También de cardiopatía isquémica, insuficiencia cardiaca y de dislipidemia.
Restringiendo el análisis a la cohorte de embarazos complicados con HTA y tras la inclusión de las diferentes variables de confusión se verificó que las hipertensas que recibieron IECAS (n = 2.631) no mostraron una mayor prevalencia de malformaciones que las hipertensas no expuestas (n= 15.884). El RR para malformaciones globales fue 0,89 (0,75 – 1,21). Para malformaciones cardiacas 0,95 (0,75-1,21). Y para malformaciones del SNC 0,54 (0,26 – 1,11).
En conclusión Las embarazadas hipertensas que han recibido IECAS en el primer trimestre no tienen un riesgo incrementado de presentar malformaciones congénitas.
Dr. Eduardo Lorca
Referencias: