Coordinador de Semana del Riñón explica el lema adoptado y su énfasis en la prevención
Bajo este lema: “Vida sana para riñones sanos” se realizará una nueva versión de la Semana del Riñón, iniciativa que promueve la Sociedad Chilena de Nefrología y que nace de la Internacional Society of Nephrology y la International Federation of Kidney Foundation, y a la cual numerosos países se han ido sumando.Del 08 al 14 de mayo se realizará en Chile la Semana del Riñón, actividad que esta vez apuntará directamente a prevenir y disminuir el sobrepeso y la obesidad en Chile. El Dr. Edgard Pais, coordinador nacional de la Semana del Riñón 2017, explica que esta última se ha convertido en una verdadera epidemia mundial. “En el 2014, más de 600 millones de personas en el mundo fueron afectadas por la obesidad, número que se incrementará en 40% ó más en la próxima década. La obesidad y el sobrepeso constituyen el quinto factor de riesgo más alto de muertes en el mundo ya que, como es sabido, la obesidad, es un factor de riesgo de enfermedades crónicas tales como diabetes, hipertensión arterial y de insuficiencia cardíaca”.
Otra grave complicación de la obesidad, explica, es la enfermedad renal crónica (ERC) y la puede causar de diversas formas. “Por un lado, podría contribuir indirectamente, al inducir o empeorar la diabetes y la hipertensión arterial, los mismos factores de riesgo bien reconocidos de la enfermedad renal crónica. Por otro lado, la obesidad también puede causar directamente daño renal, al sobre exigir el funcionamiento de los riñones durante muchos años (un cuerpo más grande necesita más función renal después de todo), y también produciendo cambios metabólicos nocivos mediados por la inflamación y el stress oxidativo. El mejor medio para combatir la enfermedad renal crónica es la prevención: por lo tanto, es fundamental identificar y tratar todos sus posibles factores de riesgo, incluida la obesidad”.
Lo positivo es que la obesidad es totalmente prevenible. Es por este motivo que la Sociedad Chilena de Nefrología ha querido, en su campaña de este año, enfocar sus esfuerzos en crear conciencia sobre la importancia que tiene la prevención, siendo fundamental el llevar una alimentación sana, ingerir suficiente agua, disminuir la ingesta de sal y por cierto realizar actividad física.
Entre las actividades a efectuar figuran charlas en distintas universidades, hospitales y colegios, “así como otras iniciativas tendientes a apoyar la difusión de la importancia epidemiológica y clínica de la enfermedad renal crónica, haciendo de nuestra sociedad no sólo el líder indiscutido en estas materias sino un reflejo de nuestro manifiesto compromiso con la salud renal en cada etapa del desarrollo de las personas” dice el Dr. Pais.
Es por todo lo anterior que se escogió como lema de la semana la frase: “¡Vida Sana para riñones sanos!” Recordemos, comenta el médico especialista, que la segunda causa de ingreso a diálisis es la diabetes y que en personas con sobrepeso y obesidad es mayor la incidencia de Diabetes tipo 2. “La relación de aumento de peso conlleva a un incremento de pacientes con diabetes e hipertensión arterial, y con ello aumenta el riesgo de padecer una enfermedad renal crónica”.
En este aspecto, como ya se dijo, la calidad de la alimentación y la actividad física son determinantes ya que la ingesta excesiva de calorías y un bajo gasto energético en personas sedentarias, produce la acumulación excesiva de grasa corporal. “Ello, sumado al alto consumo de sal, desencadenan enfermedades metabólicas como: obesidad, hipertensión, diabetes, hipercolesterolemia, todos factores de riesgo cardiovascular y de enfermedad renal crónica”, acota.
La recomendación de los médicos especialistas es preocuparse de los riñones desde la gestación. “La madre en el embarazo debe cuidar su alimentación en relación a la cantidad y calidad de los nutrientes. Debe controlar periódicamente su peso, presión arterial, perfil lipídico, salud bucal y mantener la actividad física, con el fin de tener un embarazo saludable que termine con el nacimiento de un niño sano que pueda recibir alimentación materna y posteriormente una alimentación adecuada de acuerdo con sus necesidades. Actualmente, se recomienda que el niño evite en sus primeros años la ingesta de sal y de azúcar, para evitar la adicción que estos alimentos crean. Es muy importante promover el consumo de agua y evitar las bebidas gaseosas que aportan colorantes, cafeína, azúcar, y sal, todas estas sustancias que resultan dañinas para la salud”, enfatiza el Dr. Pais.
“Un descuido de la salud renal puede tener graves consecuencias que van desde cuadros inflamatorios e infecciosos del riñón, los que podrían agravar lesiones preexistentes, hasta la pérdida total de la función de ambos riñones, obligando al paciente a ingresar a diálisis o a considerar un trasplante de riñón”, concluye.